domingo, 2 de diciembre de 2007

la primera vez que estuve en zazen


PRIMERA PARTE.

zazen se refiere a la practica de lbudismo zen, en la cual se mantendría la postura precisa, la actitud mental precisa y la respiración precisa.


durante mucho tiempo busque un lugar en el cual pudiera realizar practicas budistas del tipo zen, pero no encontraba nada que me hiciera sentir comodo. pasó el tiempo y deje de buscar, y de pronto , sin darme cuenta casi, hable con alguien que conocia a alguien que practicaba budismo zen. me acerque a esa persona y me dio las indicaciones necesarias para que pudiera ir.
Ese dia me levante a las cuatro de la mañana para poder llegar al lugar de practica, que quedaba lejos de mi casa. ese dia tenia una prueba en la universidad, lo cual me ponia un poco nervioso ( ¿deberia estar estudiando en vez de ir?), pero pense que si no iba ese dia, cada dia surgirian nuevos pretextos, y nunca iria ( a veces buscamos cosas que nos atemorizan).

SEGUNDA PARTE

Cuando me baje del bus intraurbano aun estaba oscuro, no habia gente en la calle salvo unas pocas que caminaban solitarias en las calles, yo era una de ellas. hacia algo de frio
camine buscando la dirección, expectante por lo que podria encontrarme a mi llegada. finalmente llegue a una casa pequeña. no habia nadie, no habia timbre, pero la ventana estaba abierta, dentro la luz estaba prendida, habia una oficina, habian rastros de que alguien estaba ahí. golpee la puerta varias veces, pero nadie salia, parecia no haber movimiento. después de varios intentos fallados me sente en un banca que habia bajo la ventana y me puse a esperar.
no se cuanto rato habra pasado antes de que llegara una persona joven de mi edad y de rostro amable, me pregunto si habia alguien, le dije que no y que llevaba esperando un buen rato; el revisó la puerta, estaba abierta, me dijo que entraramos. El entró por un pasillo, yo me quede en la sala. habia una pecera grande con muchos peces de distintos tipos, y una estatua grande de budha en meditación.
de pronto vuelve la persona y me dice que entre, que la practica ya habia empezado, yo lo segui por el pasillo y de pronto el entro por una puerta de ventanas forradas en papel, al estilo japonés. yo me saque mis zapatos, mi abrigo y deje mis cosas en una banca, luego entre al dojo.

TERCERA PARTE

De fondo se esuchaba el sonido del agua cayendo, solo que no sabia donde. había un altar con una estuatilla de budha y frente al altar el maestro meditando, en otro estado, me dio la impresión de que sabia que estabamos alli, pero que a la vez no lo notaba.
no habia más gente. me senté en un cojín con las piernas cruzadas,mirando a la pared, e intente emular la posición de zazen, pero no tenia idea. cuando creí entrar en zazen (insisto: no tenía idea)
aparece el maestro a mis espaldas y corrige mi postura. comence a intentar entrar en estado meditativo, pro no podia, mi mente me llevaba , no me dejaba trankilo, cada vez que llegaba alguien me distraía, me acorde de una tecnica en la cual la mente se concentra rapidamente, y procure aplicarlo, sin embargo la mente de vez en cuando seguia llevandome.
estaba amaneciendo y el maestro dice:
practicar zazen significa estar en la postura correcta, tener la actitud mental correcta, respirar correctamente. ……. Nuestra mente, constantemente nos lleva al pasado o a nuestros anhelos. Practicar zazen significa estar aquí y ahora.
en ese momento recorde cuando practicaba con la guitarra, mientras hacia ejercicios de digitación se llegaba a un estado parecido.
y el maestro dice: practicar zazen es como practicar un instrumento musical, se está completamente ahí ( debo confesar que ahí me dio un poco de miedo seguir pensando)

de repente comence a ver luces de colores que se movian frente a mi, recorde que habia escuchado que en zazen, cuando aparecen este tipo de estimulos, uno debe hacerles caso omiso, ya que son un modo de autodistracción, me imagine que era una manifestación de la mente que se defendia de actuar de un modo distinto al que esta acostumbrada.
en eso suenan unas campanas. habian pasado 45 minutos, y yo no me habia dado ni cuenta de ello.
ahora la sala estaba llena de gente. todos se sentaron mirando hacia el frente, dando la espalda a la pared. y al ritmo de dos percusiones se cantaron lo que supongo eran mantras, sentia mi cuerpo caliente y mi cabeza extraña, sobre todo cuando hacían sonar una campana.
la meditación había terminado y nos dispusimos a salir en orden del dojo.